El pasado 13 de Julio de 2015, el Senado de España aprobó el proyecto de Ley de Patentes. El objetivo fundamental de la nueva ley es equiparar la normativa al ámbito internacional y fortalecer el sistema de patentes español. Con ello se pretende fomentar y proteger la innovación en España.
¿Cuáles son los principales cambios de la nueva Ley respecto a su antecesora?
Se modifica el sistema de concesión, exigiendo superar un Examen previo de patentabilidad para todas las solicitudes. A día de hoy, existe otro sistema alternativo al que un titular de patente se puede acoger, el Procedimiento General de Concesión, sin Examen. Existiendo por tanto patentes concedidas aún sin haber superado las objeciones de patentabilidad. Este sistema desaparece por lo que las patentes concedidas serán solo aquellas que hayan superado el Examen (Sistema similar al del EPC).
Se reduce en un 50% la tasa de solicitud, búsqueda, examen y tres primeras anualidades, para emprendedores, PYME y Universidades públicas. Esta bonificación para Universidades podrá ser de hasta el 100 % en caso de que se acredite la explotación de la invención protegida.
Con respecto a los Modelos de Utilidad:
- Se amplía su ámbito de aplicación a los productos químicos.
- Se les exigirá el requisito de novedad mundial y no nacional como en la actualidad.
- Además se garantiza su solidez mediante la exigencia del Informe sobre el Estado de la Técnica (IET) prejudicial.
Se incluyen expresamente en la Ley entre los títulos de protección los Certificados Complementarios de Protección, o CCP, que en la actualidad se regulan de forma paralela.
Se aclara además el régimen de las invenciones laborales (las que se producen en el contexto de una relación profesional), simplificándose su procedimiento y aumentando la seguridad jurídica.
Se simplifica la regulación de las denominadas licencias obligatorias, que son aquellas que, por razones de interés público, el titular de la patente debe dar en todo caso para evitar que una invención quede sin explotar.
Esta ley entrará en vigor el 1 de abril de 2017, por lo que 2016 será sin duda el año en el que se conocerán más datos acerca de cómo se prevé su implementación y se planteen las nuevas estrategias de protección.
Por Patricia Ramos, directora de Patentes de PONS IP.
