Todas las empresas generan información de diversos tipos, la más importante es la que por su contenido está vinculada a ventajas competitivas de la compañía.
¿Cómo puedes proteger esa información para evitar la pérdida de ventaja competitiva? En muchos casos, manteniéndola en secreto.
El Secreto Empresarial, un activo estratégico
El secreto empresarial es una de las figuras de protección más utilizadas en la actualidad para la protección de innovaciones y, muchas veces, la única forma de proteger información valiosa que no tenga carácter técnico. Además es una vía de protección ágil y competitiva en todo tipo de organizaciones, ya que es una herramienta que no requiere de registro, no está sometida a juicio ni valoración de ninguna institución o autoridad gubernamental y tiene un efecto inmediato (al no existir tiempos de espera para que la protección sea efectiva).
¿Cómo se protege el Secreto Empresarial?
Lo primero es entender de qué tipo de información disponemos y cómo es tratada, así como identificar su naturaleza y contenido, ya que de ello dependerá si es susceptible de constituir un Secreto Empresarial o no.
Pueden ser secretos empresariales información de cualquier naturaleza (técnica, económica, financiera, organizativa, metodologías, etc.) siempre que cumpla los siguientes requisitos:
- Que sea secreta.
- Que tenga valor empresarial, actual o potencial.
- Que haya sido objeto de medidas de protección razonables por parte de su titular para mantener su carácter secreto
¿Qué establece la Ley de Secretos Empresariales?
La Ley de Secretos Empresariales, sólo protege a aquellas empresas que acrediten que han adoptado medidas concretas para mantener la confidencialidad de la información o conocimientos que se pretende proteger mediante esta figura. Es decir, si bien la utilización de los secretos empresariales dota de mucha flexibilidad y aporta ventajas a quien sabe utilizar la figura adecuadamente, es también cierto que tienen una cierta fragilidad: pueden ser destruidos si no son manejados con la debida cautela por su titular.
La ley de Secretos Empresariales establece la ilicitud de la divulgación, obtención o uso no autorizado de la información relacionada con secretos empresariales. Además, el código penal también castiga con penas de cárcel el robo de secretos empresariales. En caso de violación de los secretos empresariales, la empresa afectada podrá demandar al infractor, solicitar el cese de actividades que supongan una violación de sus secretos empresariales, reclamar daños y perjuicios, etc. En definitiva, el objetivo de esta ley es dotar a las empresas que optan por esta forma de proteger sus innovaciones de un arsenal muy potente de acciones legales para la defensa de sus intereses y asegurar que otros competidores no se aprovechan ilícitamente del esfuerzo invertido en mejorar sus productos y servicios.
¿Qué aporta un proyecto de Secretos Empresariales?
Trabajar con un proyecto de Secretos Empresariales, dotará a tu compañía de flexibilidad y agilidad para adaptarse a un mercado en el que el ciclo de vida de las innovaciones es cada vez más corto.
El secreto empresarial, a diferencia de los derechos en exclusiva que genera una patente, marca, etc., se sustenta en la capacidad de mantener el control sobre la información en que consiste, lo que hace que muchas veces se hable de un monopolio de facto. Es decir mientras su titular será quien obtenga los beneficios del secreto mientras mantenga su capacidad de controlar la información -decidir quién la usa y para qué- y evite divulgaciones.
Abordar un proyecto de secretos empresariales:
- Favorece el afloramiento de un mayor número de activos empresariales.
- Permite gestionar riesgos derivados del manejo de información de terceros y de la pérdida de información propia.
- Refuerza la posición jurídica de la compañía en caso de conflictos.
- Incrementa del valor de la compañía.
Tener un Protocolo de Secreto Empresarial en tu empresa redundará en la mejora de su posicionamiento competitivo. Permitiéndole apropiarse de activos estratégicos que la acompañarán en cada movimiento.
